Funcionarias del CESFAM San Felipe El Real sufren grave agresión y asociaciones exigen medidas de seguridad urgentes

El hecho, es calificado como una vulneración “inaceptable” a la integridad física y emocional del personal.//

Las asociaciones de funcionarias y funcionarios del CESFAM San Felipe El Real denunciaron un grave episodio de violencia ocurrido recientemente al interior del establecimiento, donde una usuaria —portando un objeto cortopunzante— agredió verbalmente, amenazó y trató de encerrar a trabajadoras del recinto.

El hecho, calificado como una vulneración “inaceptable” a la integridad física y emocional del personal, generó preocupación tanto por la seguridad interna como por el impacto en la relación de confianza con la comunidad. Las organizaciones expresaron su rechazo categórico a cualquier acto de agresión y manifestaron su apoyo total a las funcionarias afectadas.

Asimismo, reiteraron su respaldo a la administradora del centro y al equipo de matronas, señalando que ninguna agresión debe minimizarse ni normalizarse. Pese a que los protocolos de seguridad fueron activados durante el incidente, las asociaciones señalaron que el episodio evidenció falencias en las medidas vigentes.

Por ello, solicitaron al Servicio de Salud Aconcagua y a la autoridad local un refuerzo inmediato de la presencia policial y una revisión de los sistemas de seguridad, incluyendo aumento de guardias, mayor control de acceso y evaluación del funcionamiento de los botones de pánico y del plan de evacuación. También pidieron reordenar y adecuar los box clínicos para mejorar puntos seguros para el personal.

Las asociaciones reafirmaron su política de Tolerancia Cero frente a agresiones, amenazas o maltrato hacia quienes trabajan en salud, recordando que en el establecimiento rigen normas de convivencia y buen trato indispensables para una atención digna.

Junto con condenar este hecho y otros antecedentes recientes, anunciaron que las y los trabajadores del CESFAM se movilizarán públicamente para exigir medidas efectivas de resguardo y recursos suficientes que permitan prevenir nuevas agresiones.

Finalmente, aseguraron que continuarán cumpliendo su labor con profesionalismo, pero insistieron en que es indispensable contar con las garantías mínimas que todo trabajador del área de la salud merece.